Los LED, Light Emitting
Diode, o diodo emisor de luz, no tienen ningún componente tóxico, y en el mismo
momento que las encendemos ya alcanzan su máximo rendimiento, al contrario que
las bombillas de bajo consumo, por lo que son bastante más eficientes a largo
plazo.
Está comprobado: si
sustituimos las bombillas tradicionales por LED podemos ahorrar hasta 140 euros
anuales en la factura. Y es que el 25% del gasto en electricidad viene por la
iluminación.
¿Sabes cuál es la vida
útil de una bombilla LED? Casi 14 años ¡!! Piensa en la cantidad de halógenos o
bombillas que podemos llegar a usar en todo ese tiempo. Las bombillas LED son
un poco más caras, pero está claro que son mucho más rentables.
Yo no hago más que buscar
por todos los comercios, y al final donde he visto las bombillas más baratas es AQUÍ. Comprueba tú mismo los precios.
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